Respuesta del General Castaños al coronel inglés que le propuso guarnecer Cádiz con tropas británicas en el verano de 1808 ante el avance del Ejército de Dupont:
"No puedo aceptar vuestra ayuda, que además no necesito, pero si pudiera, preferiría entregar Cádiz a los franceses a que sucediese con Cádiz lo que con Gibraltar".
El 19 de Julio, don Javier Castaños demostró que efectivamente no necesitaba la ayuda de los hijos de la Gran Bretaña para derrotar en Bailén, con tropas reclutadas apresuradamente entre campesinos, garrochistas y restos de regimientos, al Ejército más poderoso de su época.
Lástima que la bravura de aquellos españoles que le dieron la del pulpo a los invasores gabachos sirviera para reponer en el trono a una dinastía de perjuros, traidores y cobardes.